Por Luis Miguel Romero
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En 1993, la película “Philadelphia” (Jonathan Demme), que tocaba el tema de la pandemia del VIH / SIDA entre la población homosexual, tuvo un gran triunfo: logró sensibilizar a muchas personas y contribuyó a cambiar un poco la perspectiva del gran público sobre la enfermedad y la orientación sexual simultaneamente. Y es que, medios como el cine, la televisión y el internet, tienen la posibilidad de llegar a muchísimas personas y aunque su finalidad no sea educar a nadie, logran transmitir mensajes muy profundos en la conciencia colectiva de todos los que consumen dichos medios.
Años después, la serie biográfica española “Veneno” (Javier Calvo y Javier Ambrosi, 2020), tuvo ese mismo efecto a nivel mundial.
El 17 de diciembre de 2023, tres años después del fenómeno mundial en que se convirtió el serial sobre la vida de Cristina Ortiz “La Veneno”, sus mismos realizadores presentan “Vestidas de azul”, una continuación de “Veneno” y que ahonda aún más en la transexualidad femenina, a partir del testimonio de vida de algunas de sus protagonistas excepcionales.
La vida de Cristina ”La Veneno” y las vivencias que vimos reflejadas en su bioserie, son las de muchísimas mujeres trans del mundo. Sobre todo de las mujeres trans que crecieron en el siglo pasado (y ya no digamos antes). Por ejemplo, en México, en plena década de los 1990’s, los términos transgénero y transexual no eran empleados por la gran mayoría. Ni siquiera dentro del mismo colectivo trans. Se les confundía con travestis y transformistas y se les llamaba de muchas formas coloquiales. La más común era "vestidas". Estas mujeres tenían todo en contra para llevar a cabo su transición. Los apoyos médicos y psicológicos gubernamentales eran prácticamente inexistentes; hablar de perfiles hormonales con endocrinólogos era un sueño. Ni hablar de cirugías plásticas feminizadoras. Ellas se valían de sus propios recursos. De allí el hecho de que muchas de ellas se sometían a tratamientos estéticos desastrosos y recurrían al consumo de hormonas recomendadas “de voz en voz”.
El acoso escolar era tan severo que muchas de ellas abandonaban los estudios y ante la consecuente falta de oportunidades laborales, habían tres caminos: shows travestis, peluquería y maquillaje o la prostitución. Ahora se habla de infancias trans, pero en aquellos oscuros ayeres, eran muy pocas las que contaban con el apoyo familiar. Eso es justo lo que pretende mostrar “Vestidas de azul”.
La serie sigue las vivencias de la periodista española Valeria Vegas quién, después de la muerte de Cristina, se dispone a buscar a cada una de las protagonistas de “Vestida de azul”, un famoso documental español de 1983 dirigido por Antonio Giménez-Rico y que aborda la vida de seis mujeres trans españolas de distintas edades, estratos sociales y circunstancias de vida: Loren, Renée Amor, Nacha, Eva, Tamara y Josette. En 2019, Valeria Vegas retomó la vida de estas mujeres en el libro “Vestidas de azul. Análisis social y cinematográfico de la mujer transexual en los años de la transición española”, que es en el que está basada esta nueva serie.
En sus siete episodios, “Vestidas de azul” retoma la vida de cada una de las protagonistas de aquel documental, cómo fue su vida, su transición, y que ha pasado con ellas cuatro décadas después de la famosa cinta. En ello, se entrecruza la vida de otras mujeres trans que no estelarizaron aquel documental pero que, de alguna forma, su vida terminó relacionándose con él. La serie cuenta con la actuación de Lola Rodríguez, quién vuelve a meterse en la piel de Valeria Vegas en este serial además de contar con la aparición de dos rostros conocidos de “Veneno”: Juani Ruiz, Alex Saint y la simpática “Paca la Piraña”, entre otras.
No es de extrañar que, gracias a su manufactura y poderoso mensaje, la serie “Veneno” causara tal impacto por donde quiera que se exhibió. Las audiencias anglosajonas, específicamente de los Estados Unidos (tan poco afectas a apreciar material proveniente de fuera de sus fronteras), se maravillaron. No es de extrañar que figuras influyentes del colectivo trans en los medios estadounidenses como las actrices como MJ Rodríguez y Angelica Ross (del serial “Pose”), la directora y guionista Janet Mock (también colaboradora de dicha serie) o el mismísimo RuPaul, expresaran su emoción ante el serial hispano que, dicho sea de paso, gozó de una calidad de producción tan impecable que haría sombra al mismísimo Ryan Murphy. No sólo marcó un hito en cuanto a seriales de contenido LGBT+, sino en cuanto a producciones biográficas se refiere.
Cristina “La Veneno” logró cruzar el Mississippi y más allá. Y ahora, siguiendo esa misma línea, “Vestidas de azul” y sus protagonistas vuelven a cruzar barreras físicas, culturales, lingüísticas y emocionales para llevar un poderoso mensaje mundial en pro de la comunidad trans, y en pro del respeto a la diversidad en general, que es tán importante que se siga difundiendo hoy en día.
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