Por Luis Miguel Romero
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Así como muchos consideran a Pedro Infante como el máximo ídolo popular del cine mexicano, si tuviéramos que encontrar su equivalente en la televisión, ese título le correspondería, sin duda alguna a Verónica Castro. La belleza y carisma de Verónica, le ganaron, desde hace cinco décadas, un lugar muy especial en el gusto del público de Iberoamérica. Este espacio de #Divas, está dedicado en esta ocasión a hablar de su vida y vasta carrera.
Verónica Judith Sáinz Castro nació el 19 de septiembre de 1952 en la Ciudad de México. Es la mayor de cuatro hermanos, hijos del matrimonio entre Fausto Sáinz y Socorro Castro. Es hermana del productor de televisión José Alberto Castro. La ausencia paterna llevó a Doña Socorro a trabajar arduamente para sacar adelante a sus hijos. La inclinación de Verónica por el mundo del espectáculo no fue casualidad. Su abuela paterna, Socorro Astol, fue dueña de una compañía de teatro. Por vía paterna, Verónica también era sobrina del popular comediante Fernando Soto "Mantequilla".
Verónica y su hermana Beatriz, consiguieron una beca para estudiar actuación en el Instituto Andrés Soler, del sindicato de actores (ANDA) de México. Al cabo de poco tiempo, la belleza de Verónica captó la atención de productores. Su carrera formal en el espectáculo inició en las célebres fotonovelas, debutando en una titulada "La romántica Samantha". Pronto, recibió invitación para ingresar a la televisión, uniéndose al grupo de bailarines del programa de variedades "Operación Ja-já", de la cadena Televisa. A la par, Verónica tomaba clases de locución y bailaba junto con su hermana Beatriz en un grupo llamado La Charris Chapis Pops, en un centro nocturno de la Zona Rosa de la capital mexicana.
Eventualmente, Verónica tiene la oportunidad de unirse al elenco del programa de concursos infantil "En familia", con el comediante y conductor Xavier López "Chabelo". En 1969, consigue un pequeño rol en la telenovela "No creo en los hombres", protagonizada por la actriz Maricruz Olivier.
En 1970, Verónica inicia su ascenso a la fama tras ser elegida como "El Rostro" en un popular certamen que organizaba el diario "El Heraldo de México". Verónica comienza entonces a trabajar de manera alternada en cine, teatro y televisión. En el cine, debuta en la cinta "Mi mesera", al lado del actor Julio Alemán. En ese mismo año, impactó a la audiencia al realizar un desnudo parcial en la cinta "El arte de engañar", de Carlos Enrique Taboada. Posteriormente trabaja junto al cantante José José en la cinta "Un sueño de amor" (1971); junto a Valentín Trujillo en la cinta "El ausente" (1972); con el comediante Manuel "El Loco" Valdés en "Bikinis y Rock" (1972); junto al cantante español Raphael en la coproducción hispano-mexicana "Volver a nacer" (1973), y con el cantante Juan Gabriel en "Nobleza ranchera" (1973), entre otras. En televisión, en 1975 obtiene el rol antagónico de la telenovela "Barata de primavera", producida por Valentín Pimstein. Por otra parte, en el teatro la actriz también obtiene un enorme éxito. En 1971, fue dirigida por Alejandro Jodorowsky en la obra teatral "El juego que todos jugamos". En 1976 estelarizó la puesta en escena "Coqueluche", quizá su éxito más notable en este medio. Por si fuera poco, Verónica también incursionó en la música. Grabó su primer álbum en 1973, e incluso fue promovida para participar en el Festival Yamaha Music, en Japón.
En 1979, la carrera de Verónica Castro alcanza uno de sus puntos más altos al estelarizar la telenovela "Los ricos también lloran", melodrama producido por Valentín Pimstein para Televisa y que logró un impacto internacional que llevó el bello rostro de Verónica por todos los rincones del globo.
Aunque Verónica ya había incursionado en la conducción desde los inicios de su carrera, en 1980 obtiene la oportunidad de ser una de las conductoras estelares del late night show "Noche a noche". En 1981, protagonizó para Televisa la telenovela "El derecho de nacer", producida por Ernesto Alonso.
En 1982, Verónica es contratada para protagonizar en Argentina la telenovela "Verónica: El rostro del amor". El éxito obtenido en el país, provoca que Verónica acepté trabajar en otros proyectos en televisión y teatro. Esto significó un distanciamiento de Verónica con Televisa durante algunos años. De la Argentina, Verónica pasó a Italia, país donde también goza de una gran popularidad. Allí grabó la telenovela "Felicita, ¿Dove sei?" y obtuvo propuestas del magnate televisivo Silvio Berlusconi para protagonizar un show de televisión en el país.
Superadas sus diferencias con Televisa, Verónica regresa a México por todo lo alto. Protagoniza la película "Chiquita pero picosa" (producida por Televisa) y lanza el disco "Simplemente todo", del cual se desprende el éxito "Macumba", que es el tema musical más emblemático de su carrera como cantante. En 1987, vuelve a las telenovelas mexicanas protagonizando la exitosa telenovela "Rosa salvaje". En 1990, Verónica debuta como productora en la telenovela "Mi pequeña Soledad", donde además, realiza un personaje doble.
En 1988, Verónica conduce uno de los late night shows más recordados de la televisión mexicana: "Mala noche...¡No!". El show corona a Verónica como una de las personalidades favoritas y más influyentes de la televisión mexicana. En 1991, Verónica regresa con un concepto televisivo similar llamado "La movida". Este es su show televisivo de más éxito y de mayor duración. En 1993, el programa rompió récords de audiencia en la famosa entrevista a la actriz María Félix.
En los 1990s, Verónica participa en las telenovelas "Valentina", (1993) y "Pueblo chico, infierno grande" (1997), en los que la actriz experimenta con otro tipo de personajes que no son de corte popular.
Tras una prolongada ausencia de la televisión, Verónica reaparece en el año 2003 como conductora del reality show "Big Brother VIP". Verónica condujo el programa entre 2003 y 2005. Fue justamente en este proyecto cuando Verónica sufre un grave accidente al caer de un elefante que montaba en una de las galas del programa.
Posteriormente, Verónica participa como conductora de algunos proyectos y programas especiales de Televisa. En 2008 finalmente regresa a la televisión en la serie antológica "Mujeres asesinas", producida por Televisa. En 2009 realiza una actuación co-estelar en la telenovela "Los exitosos Pérez". En 2015, Verónica regresó al teatro protagonizando, por una corta temporada, el musical "Aplauso".
En 2018, Verónica regresó con gran expectativa para protagonizar la primera temporada de la exitosa serie "La casa de las flores", producida por Manolo Caro para Netflix. La serie obtuvo un éxito inusitado, pero Verónica no participó en las temporadas posteriores de la misma.
En 2022, Verónica retoma su carrera cinematográfica, estelarizando la película "Cuando sea joven", bajo la dirección de Raúl Martínez y producida por Eugenio Derbez.
Los hijos de Verónica heredaron su talento artístico. Su hijo mayor, Cristian Castro, es uno de los cantantes baladistas más populares de México. Su hijo menor, Michelle, es productor y director de cine.
Aunque Verónica mantiene una distancia con su carrera artística, limitándose a apariciones muy puntuales, lo cierto es que el público, la prensa y la crítica siempre esperan con expectativa su regreso. Y es que Verónica Castro es uno de los últimos íconos de la televisión que existen en México y, como se mencionó en las primeras líneas, tal vez también uno de los últimos ídolos populares.
VERÓNICA CASTRO EN LA WEB:
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