Por Luis Miguel Romero
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En el año de 1993, la cadena de televisión mexicana Televisión Azteca, irrumpe en la señal televisiva del país para romper con el monopolio que durante más de cuarenta años ejerció la cadena Televisa en México. Si algo caracterizó a la llamada “televisora del Ajusco” en sus inicios, fue que buscaron originalidad en sus contenidos, específicamente en el género de la telenovela. De allí se desprenden melodramas televisivos que rompen con la línea tradicional como “Nada personal” (1996) y “Mirada de mujer” (1997). Y justo en medio de ese interés de ofrecer una televisión mexicana “diferente”, Azteca presenta a las audiencias una telenovela de horror y suspenso, la primera realizada en México en más de una década. En este espacio de #Telenovelas, hablaremos de la telenovela “La Chacala”.
“La Chacala” es una telenovela mexicana estrenada en 1997. Fue producida por Christian Bach y Humberto Zurita con ZUBA, su casa productora, para la señal del canal 13 de Televisión Azteca. La telenovela fue dirigida por Juan Carlos Muñoz y Martín Barraza y protagonizada por la propia Christian Bach. La historia fue creada por el escritor guatemalteco Eric Vonn, autor de otras notables telenovelas como “Amor en silencio” (1988), “Días sin luna” (1990) y “Amor de nadie” (1990), entre otras. Además de la ya mencionada Christian Bach, la telenovela contó con un reparto de actores integrado por Jorge Rivero, José Alonso, Roberto Blandón, Julia Marichal, Rafael Sánchez Navarro, Enrique Novi, Regina Torné, Edgardo Eliezer, Anna Ciocchetti, Ramiro Huerta, Lina Santos, Wendy de los Cobos, Miguel Ángel Ferríz, Mayra Rojas y la aparición especial de Angélica Aragón. Sin más preámbulo, el argumento de la telenovela es el siguiente:
Javier Almada (Rivero) y su esposa Delia (Bach), llegan a una finca ubicada en un pueblo remoto. Delia está embarazada, y a pesar de estar rodeada de amor y comodidades, se siente incómoda en el lugar. Un día Javier sale de cacería y mata a un ciervo que, ante su asombro, se convierte mágicamente en un hombre. Los sirvientes de Javier tiran el cadáver a un barranco y le dicen que se olvide del incidente. Sin embargo, el fantasma del muerto, un hombre de color llamado Simón (Eliezer), busca a su madre, Dominga (Marichal), la poderosa bruja negra de la región. Dominga jura vengar la muerte de su hijo y se presenta en la finca de Javier. En medio de una tórrida tormenta, Dominga maldice a la Familia Almada.
La maldición de la mujer cae sobre las niñas gemelas que espera Delia, una de las cuales será la encarnación de un temible demonio. Delia da a luz a una niña y todos respiran aliviados, pero unas horas después Delia, da a luz a otra niña que la lastima brutalmente al nacer, ocasionándole la muerte. Siendo las niñas idénticas, es difícil determinar cuál de ellas causó la muerte de su madre.
Pasan los años y las gemelas poseen personalidades muy distintas: Gilda (Bach) es una prominente médico radicada en la ciudad, mientras que Liliana (Bach), es una mujer frágil y enfermiza que radica en la finca con su padre. No obstante, en una de ellas habita un terrible demonio conocido como “La Chacala”, el cual pronto hace su aparición trastornando la vida de quienes la rodean.
Originalmente la telenovela le fue ofrecida por su autor a la cadena Televisa en 1991, específicamente a la productora Carla Estrada, y se pensó en la actriz María Sorté para protagonizarla. Sin embargo, la televisora finalmente no se interesó en el proyecto. En 1997, los actores y productores Christian Bach y Humberto Zurita abandonan Televisa para integrarse a las filas de Azteca con un jugoso contrato, para actuar y producir telenovelas. Fueron ellos quiénes retomaron el proyecto de “La Chacala”. La telenovela se estrenó el 3 de noviembre de 1997 a las 20:30 horas en el canal 13 de Azteca (hoy Azteca 1). Sin embargo, debido a su temática controvertida, tuvo muchas variaciones en sus niveles de audiencia, además de escandalizar a un sector muy conservador de la sociedad y a grupos religiosos. Por ello, fue removida varias veces de horario, y finalmente la removieron al canal 7 de la televisora, finalizando transmisiones el 10 de julio de 1998.
Desde “El maleficio” (1983) y “El extraño retorno de Diana Salazar” (1988), los temas del horror, suspenso y ciencia ficción, no se habían abordado en las telenovelas mexicanas. De hecho, “La Chacala” es la última telenovela en México en abordar este género. Para darle legitimidad a la trama, se necesitaron varios efectos especiales. Algo común en las telenovelas de Azteca de la época era utilizar técnicas cinematográficas en sus producciones. Esta telenovela no fue la excepción. El demonio conocido como “La Chacala”, solo apareció “oficialmente” en una ocasión en la trama, causando un gran impacto entre el público televidente, a pesar de que el efecto especial fue muy pobre, valga la época y valga el presupuesto del género del melodrama televisivo.
Y desde ese entonces, hace más de dos décadas, el género del horror y suspenso parece estar muerto dentro de las telenovelas mexicanas. Si bien se han realizado series y unitarios de ciencia ficción en el país, parece que ya los productores no apuestan por este tipo de producciones. O bien por el costo presupuestal de los efectos, o para no escandalizar a las audiencias más “tradicionalistas”. De esta manera, “La Chacala” sigue ostentando el privilegio de ser la última telenovela realizada en México de este género. Por ello, el melodrama hoy en día ha ganado un estatus de culto entre los seguidores de lo kitsch y lo camp en la televisión mexicana.
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